La Quimioteca Pública Española ya es una realidad. Presentada el pasado 24 de abril en la facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación de la Universidad de Barcelona, esta nueva infraestructura nacional nace con el objetivo de poner en valor los compuestos químicos desarrollados en universidades y centros públicos, facilitando su evaluación en ensayos biológicos para descubrir nuevas funcionalidades de interés. Su propósito es claro: acelerar la transferencia del conocimiento científico hacia aplicaciones biomédicas concretas, en el marco de una ciencia abierta y colaborativa.
Un proyecto estratégico al servicio de la transferencia
La jornada de presentación reunió a representantes institucionales y científicos clave, como Juan Guárdia (rector de la Universitat de Barcelona, UB), Mabel Loza (patrona fundadora de la Fundación Kaertor y responsable científica de Galicia del Plan Complementario de Biotecnología Aplicada a la Salud y coordinadora de la Línea de Actuación 3), Josep Samitier (director del IBEC y coordinador del Plan Complementario de Biotecnología Aplicada a la Salud), Marçal Pastor (director del IBUB) y Jordi García (vicerrector de investigación de la UB). Todos coincidieron en destacar la relevancia estratégica de la Quimioteca como herramienta de impulso a la innovación, y como ejemplo del esfuerzo colectivo coordinado desde Galicia a través de la línea 3 de actuación del Plan Complementario de Biotecnología Aplicada a la Salud y la Red Estratégica ES-OPENSCREEN.
Uno de los grandes valores añadidos de la Quimioteca es su integración con EU-OPENSCREEN, la principal red europea de cribado químico. Santi Vázquez (Facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación, UB, IBUB) e Israel Ramos (IRB Barcelona) fueron los encargados de explicar cómo se articula una estrategia complementaria que permite a cualquier grupo investigador enviar compuestos a ambas iniciativas, ampliando las posibilidades de análisis en contextos nacionales y europeos, maximizando las oportunidades de descubrimiento de nuevas moléculas bioactivas y reforzando la visibilidad internacional de la ciencia española.
¿Cómo funciona y quién puede participar?
Durante el segundo bloque, Antonio Gómez (Fundación Kaertor) explicó el funcionamiento general de la plataforma: el acceso está abierto a grupos académicos y centros públicos, bajo un modelo que garantiza la protección de la propiedad intelectual mediante acuerdos MTA gestionados por las OTRIs. La unidad de Gestión de Compuestos de la plataforma Innopharma ubicada en el CIMUS de la Universidad de Santiago de Compostela y puesta a disposición de la iniciativa, puede almacenar hasta 800.000 compuestos, que deben cumplir requisitos como una pureza >90% y estar correctamente solubilizados y validados. Los criterios de aceptación y el procedimiento detallado pueden consultarse en el portal oficial de la Quimioteca.
Además, durante la jornada, Carmen Escolano y Celia Escriche (Facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación, UB, IBUB) ofrecieron una sesión práctica sobre cómo registrar y enviar compuestos, resolviendo las dudas que fueron apareciendo en los asistentes presenciales y online. El evento concluyó con una sesión participativa de preguntas y un cierre institucional a cargo de Jordi Camarasa (decado de la UB), Mercè Pallàs (adjunta al rector de la UB) y Antonio Gómez (consejo asesor de la Fundación Kaertor). Todos reafirmaron el compromiso con una ciencia más abierta, conectada y orientada al impacto, en la que la Quimioteca Pública Española pueda consolidarse como un verdadero motor de innovación biomédica en España.